Sin duda la mayoría de pacientes oncológicos ven alterado su estado nutricional y por ende su dieta, que debe ser modificada para ser parte integral del tratamiento oncológico. Si bien es cierto que la dieta del paciente con cáncer debe ser adaptada para cumplir las diferentes necesidades clínicas del paciente, como son la cantidad y tipo de carbohidratos, grasas, proteínas, vitaminas y minerales, es preponderante procurar la adherencia del plan de alimentación del paciente, para esto el plan de alimentación debe generar el mayor confort posible al paciente, ayudar a contrarrestar efectos adversos y complicaciones, debe gustarle al paciente y debe ser tolerada, esto no es nada fácil de hacer, de hecho muy rara vez se pueden cumplir todas estas características, pero entre mas nos acerquemos, mejores va a ser los resultados.
alimentación en cáncer
Ajustamos la alimentación acorde a las necesidades del paciente.
ALIMENTACIÓN EN CÁNCER
Ajustamos la alimentación acorde a las necesidades del paciente.
INTERVENCION NUTRICIONAL EN LA ACTUALIDAD
Una cosa, es el deber ser, y otra cosa es lo que se realiza en la práctica, con tristeza digo que es lamentablemente que muchos profesionales en oncología en el país, incluso en Latinoamérica desconocen el adecuado manejo nutricional del paciente oncológico y realizan restricciones sin sentido a la dieta, dejándose llevar por mitos o costumbres, peor aún, algunos no recomiendan ningún manejo nutricional, esto es debido a falta de actualización, o uso de literatura sin suficiente nivel de evidencia científica, pero hoy en día ya tenemos muchas más herramientas y evidencia sólida para poder realizar una mejor intervención nutricional. Es importante tener presente que la alimentación por si sola no va a curar la enfermedad, pero si puede mejora la sensación de bienestar, disminuir la pérdida de peso, mejorar el estado nutricional, lo que ayuda a la recuperación del paciente, evitar complicaciones y mejorar así todo su pronostico clínico.
PERDIDA DE PESO Y APETITO
El cáncer afecta la dieta y los hábitos alimenticios de una persona de muchas maneras. La enfermedad en sí misma puede causar pérdida de peso, falta de apetito u otros problemas asociados con la alimentación, por lo que se hace necesario adaptar una alimentación para que esta pueda ser mas densa y así poder suministrar muchas más calorías y nutrientes en la menor cantidad posible, que a su vez sea de fácil tolerancia y sea de su agrado para lograr la mejor aceptación y tolerancia posible. Esto no es tarea fácil por lo que se requiere que una nutricionista dietista pueda adecuar la alimentación y poder así brindar el mejor aporte nutricional posible.
NUTRICIONISTA ONCOLÓGICA
LAURA RICO
Diplomada en Oncología, Nutrición clínica y metabolismo, Certificada por la Sociedad Europea de Nutrición Clínica en Soporte nutricional preoperatorio
NUTRICIONISTA ONCOLÓGICA
LAURA RICO
Diplomada en Oncología, Nutrición clínica y metabolismo, Certificada por la Sociedad Europea de Nutrición Clínica en Soporte nutricional preoperatorio
COMPLICACIONES DE LA ALIMENTACIÓN
El tratamiento quirúrgico puede afectar la deglución (capacidad de deglutir o tragar) o el funcionamiento del tracto digestivo por lo que la alimentación se debe suministrar por sonda. La radioterapia y la quimioterapia pueden causar náuseas, diarrea, pérdida de apetito y cambios en el sentido del gusto y el olfato, por lo que se hace necesario en muchos casos contar con el apoyo de fonoaudiología para determinar la consistencia de alimentos a suministrar y habilitar lo más rápido posible la vía oral y a su vez el nutricionista debe identificar los alimentos que le generan nauseas, diarrea u otra sensación de malestar para remplazarlo por algún otro que sea de mejor tolerancia o aceptación y así poder garantizar la alimentación, lo más adecuadamente posible.
EMOCIONES Y ALIMENTACION
Los cambios de humor o la depresión relacionados con la enfermedad también pueden afectar el apetito, por lo que la ingesta de alimentos a menudo disminuye, lo que resulta en la pérdida de peso. Algunos pacientes con cáncer pueden incluso sufrir de desnutrición, lo que puede impedir la recuperación y la resistencia. En estos casos es necesario comprender al paciente y no obligarlo a comer, pero si buscar asesoría nutricional urgente para implementar estrategias nutricionales para evitar su empeoramiento, para esto es indispensable la adaptación de la alimentación según la sensación de bienestar o molestia que le generan los alimentos, por lo cual es necesario entrevistar al paciente y realizar una anamnesis alimentaria de cada momento de comida del día y de cada uno de los alimentos que consumen e ir ajustando la dieta teniendo en cuenta su tolerancia y gusto, muchas veces es necesario recurrir a suplementación o implementar el uso de sonda.
alimentación en cáncer
Ajustamos la alimentación acorde a las necesidades del paciente.
ALIMENTACIÓN EN CÁNCER
Ajustamos la alimentación acorde a las necesidades del paciente.
PACIENTES SIN ALTERACIONES EN SU PESO
Para algunos pacientes con tratamiento de cáncer, la situación puede ser completamente opuesta. Los medicamentos hormonales o de cortisona pueden hacer que aumente el apetito y el peso. Aunque el tratamiento no cause pérdida de peso, pero es necesario mantener una adecuada alimentación, acorde a su historia clínica y antecedentes de salud, eligiendo alimentos saludables y haciendo más ejercicio de acuerdo con su resistencia. Con el objetivo de evitar mantener la masa muscular y evitar otro tipo de déficit nutricional o prevenir complicaciones.
RECOMENDACIONES GENERALES
Es importante que los pacientes con cáncer se aseguren de tener una dieta variada y una ingesta adecuada de líquidos, prevenir la perdida de peso, así se presente exceso de peso, es importante obtener un aporte calórico suficiente y los nutrientes de sus comidas diarias. Una alimentación completa es requerida para mejorar el estado nutricional del paciente, por lo que se recomienda incluir, carbohidratos, frutas, verduras, lácteos, proteínas y grasas saludables, también se recomienda evitar grandes cantidades de comida y suministrar porciones pequeñas varias veces al día. Puede picar complementos alimenticios preparados, que contienen abundantes nutrientes en pequeñas cantidades. Es indispensable que el paciente con cáncer tenga una alimentación individualizada, elaborada por un nutricionista oncológico.